La momia 3, la tumba del emperador dragón

La momia 3

Tengo que recordarme a mí mismo no ver nunca terceras partes de películas. Nunca más, ya me pasó con otras sagas palomiteras como Piratas del Caribe o Matrix, que la primera mola, la segunda cae un poquito y la tercera directamente apesta.

La saga de la momia empezó muy bien con la primera película, acción y homenaje a la serie B de aventuras, con una referencia muy clara a Indiana Jones. Esta primera película se puede ver varias veces, te ríes, tiene mucho ritmo y acción. Un entretenimiento muy logrado, una buena película de humor y aventuras.

Como suele pasar, la segunda parte es un “cuanto más, mejor” baja un poco de nivel, pero como entretenimiento cumple. Sin embargo, esta tercera es mala, del mismo orden que “El Rey Escorpión”.

Tiene montones de fallos, primero de todos, que no hay momias, son guerreros de terracota. Segundo, que Rachel Weisz (con buen criterio) no aceptó el papel de Evelyn y Maria Bello no le llega a la suela del zapato. No es una mala actriz, pero este papel no le pega nada. Además estamos acostumbrados a la otra cara. Y el hijo, más que hijo, parece hermano pequeño de sus padres.

La única parte un poco decente es el principio, cuando cuentan la historia del emperador chino. Me recuerda enormemente a “Hero”, también con el propio Jet Li. Es vistosa, bonita y con peleas al más puro estilo “Tigre y Dragón”. Pero una vez aparecen los protagonistas sale una historia ortopédica, plagada de tópicos y de giros absolutamente absurdos incluso para una película de este estilo. Especialmente esos Yetis que aparecen para sacarles las castañas del fuego. Un despropósito tras otro, con chistes muy pueriles y escasos. El alivio cómico de las otras películas, el hermano de Evelyn, está ahí de relleno y para recordarte las otras películas, sin ningún papel en la historia, ni siquiera buenos chistes. En fin, malísima, carne de emule.

En pocas palabras, una decepción que me hizo irme de copas después para olvidarla. Y mira que no iba con muchas expectativas, pero su nivel es tan bajo que no merece ni siquiera el digno nombre de cine palomitas. Estoy pensando que deberían capar el uso de ordenadores para que los guionistas no pongan en la pantalla todo lo que se les ocurre.

Si alguien os quiere invitar a verla, huid, no miréis atrás, corred hasta quedaros sin aliento.